Existen muchas formas de personalizar tartas. Una de ellas es la de imprimir una foto sobre la tarta, de tal forma que se pueda comer.
Sí, puede que te resulte extraño, pero las fotos son comestibles. Las imprimimos sobre una oblea con unas tintas especiales comestibles. Una vez colocadas las fotos sobre tartas, las cubrimos con gelatina en frío, para darles más brillo y queden relucientes.
Cómo reservar una tarta con foto
Las tartas con foto se pueden hacer prácticamente en todas las tartas de nuestro catálogo. Para ello, debes acudir con la foto a una de nuestras dos tiendas con, al menos, un par de días de antelación. Lo puedes entregar en formato digital (USB) o en papel –después te devolvemos la foto–.
Las fotos pueden ser de todo tipo. Hay quien imprime fotos de familia, de aniversarios de boda, de equipos deportivos, de kuadrillas y hasta de los dibujos animados preferidos de los más pequeños de la casa.
¡Anímate y personaliza tu propia tarta!